¡Vamos a jugar... al "teléfono roto"!

El juego del teléfono viene muy bien para estimular la atención y la memoria. Además, para pasar un buen rato ya que es muy divertido y se suelen producir situaciones hilarantes. Es uno de los grandes clásicos que si se lo enseñas a los chicos y chicas, luego van a querer hacerlo en el recreo. 

Pero, además, de la diversión que proporciona, es un recurso también muy adecuado para otros aspectos:

- Mejora la atención auditiva, ya que deben concentrarse en escuchar con atención para captar el mensaje.
- Mejora la cooperación y el diálogo, al compararse al final del juego lo que escuchó cada uno.
- En todas las edades, desde Educación Infantil a Primaria, es un juego que sirve para ejemplificar, explicar y prevenir sobre los rumores, desinformación y bulos, mostrando la forma en la que un mensaje puede alterarse con el paso del tiempo.

Recursos: No hacen falta y puede jugarse tanto en exterior como en interior.

Edad: A partir de 5-6 años

Desarrollo: Los niños y niñas se sitúan haciendo un círculo en el suelo (o también en línea) y uno comienza contando al oído al compañero de al lado una frase, palabra o historia que se le ocurra. La norma dice que solo se lo repetirá una vez, así que tiene que estar atento. Este segundo niño se lo dirá a su vez al compañero de al lado y así sucesivamente hasta completar el círculo o llegar al final de la fila. El último niño dirá el mensaje que ha recibido en voz alta y se compara con lo que se había dicho originariamente. Cada uno dirá qué entendió.